La casta

Leyendo por internet, acabé en el blog de una persona que me pareció muy interesante sobre todo el siguiente artículo:

La casta: el increíble chollo de ser político en españa

Os aconsejo que le echéis un vistazo al blog porque es bastante interesante lo que se publica.

Lo que he leído algunas cosas sabía, otras me olía y de otras no tenía ni idea. La verdad que me parece vergonzoso y un abuso que se use así el dinero. Es muy fácil soltar clichés y dejar las cosas en el aire para que hagan los demás mientras ellos se lavan las manos, o mejor dicho, se llenan las manos. No es envidia, es vergüenza ajena que gente así nos esté gobernando, y por supuesto, no me refiero solamente al gobierno español, que en sí, me parece de las peores "democracias" que existen en Europa.

Para que luego nos hagan creer que los privilegios de clases se abolieron hace tiempo. Y una mierda.

Duele

Cuando dices que no hay nada que decir, y luego resulta que hay muchas cosas que contar. Duele enterarse de que no tienes interés en contarme algunas cosas, cosas que para mí son importantes, no el hecho de saberlas, sino el detalle de hacérmelo saber. Pero tu respuesta es que no hemos hablado los últimos días.

Duele pensar que no me llamas para ponerme al día de tu vida. Esas cosas, todas duelen y no te das cuenta. Si no te das cuenta, no me preguntes por qué lloro, porque deberías saberlo.

Lágrimas

Las lágrimas no tienen color sobre mis mejillas. Son transparentes como los sentimientos que las hacen aflorar. Se deslizan sobre la piel dejando una sensación agridulce entre caricia y ardor, igual que tus caricias. Me arropan en la noche y me desnudan al alba acompañadas del dolor de cabeza por haber estado exhalando emociones en la oscuridad. Solo mantienen su transparencia cuando las lágrimas son puras, cuando no tienen envidia ni ambición, sin egoísmo, solo son puras con el más sincero dolor. Aunque es cierto que yo no conozco las lágrimas de alegría.